La tarde del 16 de febrero de 2021 quedó marcada en la historia de Colo Colo. Así lo recordó hace poco el querido Peluca cuando dijo “esa ida a Talca que no me olvido más”. El equipo, al borde del descenso, emprendió un viaje para disputar una final que definiría su futuro en Primera División. Y este viaje, más que un traslado, se transformó en una verdadera odisea, marcada por la pasión, la tensión y la incertidumbre.
“Esa ida a Talca” cuenta la leyenda alba
La pasión colocolina en la previa de la final de Talca
Desde las primeras horas de la mañana, miles de hinchas se congregaron a las afueras del Estadio Monumental para despedir al equipo. La emoción era palpable, pero también la preocupación. Un lienzo con amenazas de muerte había enrarecido el ambiente, generando una mezcla de miedo y determinación en la hinchada.
Una caravana de hinchas colocolinos
A medida que el bus de Colo Colo avanzaba por la Ruta 5 Sur, la caravana de hinchas colocolinos se hizo cada vez más numerosa. Cánticos, banderas y bocinazos acompañaron al equipo en todo momento, creando una atmósfera electrizante. Sin embargo, esta pasión desbordante también generó enfrentamientos con las fuerzas policiales, que buscaban garantizar la seguridad de los jugadores y del público en general.
A pesar de todo nadie se rindió
La tensión se palpaba en cada rincón de la carretera. Los hinchas, desesperados por brindar su apoyo al equipo, se aglomeraban en las carreteras, provocando congestión vehicular y altercados con las autoridades. La policía, por su parte, implementó un fuerte dispositivo de seguridad, con el objetivo de evitar incidentes mayores y garantizar el normal desarrollo del partido.
A pesar de los obstáculos, los hinchas no se rindieron. En cada peaje, en cada ciudad, los hinchas colocolinos esperaban con ansias el paso del bus, demostrando un nivel de compromiso y pasión que pocas veces se había visto.
Colo Colo llegó a Talca y ganó
Finalmente, después de horas de viaje y de emociones encontradas, el bus de Colo Colo llegó a Talca. La ciudad se encontraba expectante ante la llegada del equipo y los hinchas colocolinos locales se sumaron a la bienvenida.
La final de Talca fue mucho más que un partido de fútbol. Fue una muestra de la pasión y el compromiso de la hinchada de Colo Colo, dispuesta a todo con tal de salvar a su equipo del descenso. Un episodio que quedará marcado en la historia del club y que demuestra el poder que tiene el fútbol para unir a las personas.
